¿Tu piel está roja, presenta lesiones o inflamación y te produce un molesto picor? Este tipo de reacciones pueden deberse a múltiples motivos pero es posible tratarlas de forma natural, por ello en este artículo te mostramos los mejores remedios caseros para las erupciones en la piel.
Las erupciones cutáneas
Una erupción cutánea (también conocida como dermatitis) es una inflamación de la piel que puede presentar distintos grados de gravedad y que generalmente se produce por el contacto de la piel con un agente que le resulta nocivo.
Las erupciones cutáneas pueden tener múltiples causas pero las principales son las siguientes:
- En pieles sensibles puede producirse por el sudor y el roce con la ropa.
- Contacto con detergentes, jabones o cosméticos.
- Contacto con plantas tóxicas.
- Contacto con sustancias químicas que pueden encontrarse en productos de látex o caucho.
Remedios naturales para las erupciones cutáneas
El prurito que produce una erupción cutánea puede ser muy molesto, pero el hecho de rascarse la piel puede agravar muy rápidamente la lesión, por ello es importante aplicar un tratamiento natural con la mayor antelación posible.
Gel puro de aloe vera
El gel de Aloe Vera puede extraerse de los tallos de este cactus o bien adquirirse en una tienda especializada. Es idóneo para tratar las erupciones en la piel por su efecto anestésico y antiinflamatorio, a la vez, ayuda a que la piel se regenere posteriormente.
Aplicación de frío local
El hielo jamás puede aplicarse directamente sobre la piel ya que podría resultar muy dañino,. Pero si se envuelve en una toalla o pañuelo de algodón resulta muy beneficioso. Por su efecto vasoconstrictor disminuye la inflamación en pocos minutos.
Patata cruda
Se debe aplicar una rodaja de patata cruda sobre el área afectada, ya que este tubérculo contiene una altísima cantidad de almidón. El almidón, aplicado tópicamente, actúa como un bálsamo que suaviza y calma la piel.
Aceite de oliva
El aceite de oliva contiene muchas propiedades nutricionales pero también medicinales, por ello, puede utilizarse también en este caso para mantener hidratada la piel y reducir la irritación. Empapa un algodón con algunas gotas de aceite y aplícalo suavemente sobre el área afectada.
Avena
La avena aplicada tópicamente alivia la inflamación y el prurito. Deberán hervirse unos copos de avena en agua hasta lograr una pasta homogénea. Una vez tengas esta pasta déjala enfriar y envuélvela en una gasa estéril de algodón, posteriormente aplícala sobre la zona afectada.