Puede que no todos lo sepan, pero poco a poco van surgiendo bacterias que son resistentes a los antibióticos, esto puede deberse a la sobremedicación que en algunos casos se sufre ya que no todos van al médico a pedir una receta, y se medican ellos mismos. Es un problema que podría afectarnos en el futuro.
Dado que los antibióticos comunes y los más eficaces también están poco a poco dejando de surtir efecto, se están ideando estratégias que intentaran paliar este tipo de situaciones en el futuro. Por otro lado hay muchos estudios que se están realizando para intentar prevenir o luchar contra este tipo de amenazas, lo que nos lleva hasta el plasma y los bacteriófagos.
¿Qué son los bacteriófagos y el plasma?
Te puede sonar a chino, porque realmente no es algo de lo que se hable de forma común, pero los bacteriófagos ya fueron utilizados en la Unión Soviética, y se están estudiando sus aplicaciones para la medicina. Al parecer, estos virus de bacterias (sí, es un virus que ataca a las bacterias) parece ser muy eficaz y prácticamente carece de efectos secundarios.
Además de esta alternativa, que no podía ser la única ya que sería poner el futuro en manos de un único remedio, se está estudiando el plasma y su utilización en tratamientos, con el mismo objetivo que los bacteriófagos, que no es otro que la eliminación de las bacterias que cada vez son más fuertes y podrían mutar en variedades mortales.
El plasma, al ser ya utilizado para otro tipo de situaciones clínicas como cirugía y otros, no es del todo novedad. Sobre los estudios y pruebas realizados por los científicos de Ruhr-Universität, se ha analizado como este particular tratamiento puede acabar con estas bacterias de forma bastante efectiva, siendo tres puntos los que ataca sobre las mismas: las proteínas, el ADN y su envoltura celular.
Las sospechas sobre los estudios indican que las bacterias serían completamente inmunes a los antibióticos en aproximadamente 10 años, pero por contra, los tratamientos con plasma de esta forma comentada podrían estar disponibles en los hospitales en un corto período de tiempo. El afán de supervivencia nos lleva a mantener este tipo de estudios y desarrollo, ya que de no ser así las consecuencias podrían ser desastrosas. Imagina que si ya de por sí una infección con bacterias es bastante grave, utilizásemos las curas habituales y por haber mutado fuese incurable y se propagase.