¿Sufres de varices? Si es así debes saber que esta afección está más presente en mujeres que en hombres y aunque desees tratarlas para mejorar la apariencia de tus piernas, las varices son indicativas de problemas circulatorios y por lo tanto deben tratarse para así mejorar nuestra salud.
Una variz es una lesión que se produce en la pared de una vena. Las venas son las responsables de retornar la sangre al corazón y para ello cuentan con una pared interna elástica y unas válvulas de retorno que se cierran al paso de la sangre para impedir que esta retroceda.
Cuando la vena pierde elasticidad y se dilata, alterando también el funcionamiento de la válvula, se produce una variz, y el aspecto de la misma puede ir desde una araña vascular (una vena oscurecida, de color morado o azulado) hasta una vena tortuosa que se observa a simple vista.
Debes hacer todo lo posible para mejorar la salud de tus venas, ya que una adecuada circulación sanguínea te ayudará a sentirte mejor, para ello, dispones de muchos remedios que actúan de forma completamente natural.
Remedios naturales para las varices
¿Cómo tratar esta afección desde la comodidad de tu hogar y de forma completamente natural? A través de numerosos recursos que aunque parezcan muy sencillos, te aportarán grandes beneficios si los aplicas con constancia, un aspecto esencial para poder obtener resultados.
Duchas de agua fría
Es uno de los remedios contra las varices más conocidos y sencillos, pero también es uno de los más efectivos.
Acabar la ducha con agua fría en círculos ascendentes desde los tobillos hasta las ingles ejerce un efecto muy positivo sobre la circulación, ya que el frío es vasoconstrictor, esto quiere decir que permite que las venas se contraigan y la sangre pueda ser retornada desde las piernas al corazón de una forma más sencilla.
Aceite esencial de ciprés
Este es uno de los mejores aceites esenciales para tratar las varices, ya que actúa tonificando los vasos sanguíneos y mejorando la circulación.
Debemos mezclar de 10 a 15 gotas de aceite esencial en medio vasito de aceite vegetal base (aceite de rosa mosqueta, de argán o de almendras dulces).
Aplicaremos esta mezcla diariamente desde los tobillos hasta la parte superior de los muslos con movimientos circulares.
Rusco
Se trata de una planta medicinal muy empleada para tratar problemas circulatorios, el rusco contrae las venas más pequeñas, desinflama la zona afectada y además mejora el estado de las paredes venosas, aumentando la elasticidad de las mismas.
No debes tomarlo si sufres hipertensión arterial, en los casos restantes lo más recomendable es que lo tomes a través de un complemento nutricional para asegurar una buena concentración de sus principios activos.
Castaño de Indias
El castaño de Indias es una planta venotónica, que ayuda a aumentar la tonicidad de las paredes venosas, previniendo la aparición de varices y disminuyendo la inflamación de las venas ya afectadas.
Al igual que sucede con el rusco, para asegurarte de que su efecto va a ser terapéutico, es recomendable que la tomes en forma de complemento nutricional.
Agua de hamamelis
Puedes preparar tu mismo el agua de hamamelis realizando infusiones con las hojas de esta planta, posteriormente, debes aplicarla sobre las zonas afectadas, siempre con movimientos ascendentes.
Esta planta actúa de forma astringente, provocando constricción en los vasos sanguíneos y desinflamando las varices.
¿Quieres aprovechar todo el potencial de estos remedios naturales para las varices? Entonces debes seguir una dieta saludable y realizar ejercicio físico de forma cotidiana, ya que el sedentarismo y el exceso de peso corporal pueden agravar la mala circulación.
¿Sufres de varices? ¿Qué métodos para disminuirlas usas tú? Comparte con nosotros.