Las semillas han sido originariamente la base de la agricultura y poseen una gran trayectoria, no obstante, su uso como alimento es relativamente reciente. ¿Sueles incorporar las semillas a tu alimentación? En este artículo te mostramos todos los beneficios que pueden ofrecerte.
Las semillas comestibles más saludables
Quizás no te hayas planteado anteriormente que las semillas pueden ser un excelente alimento, pero lo cierto es que existen múltiples semillas comestibles, siendo las más recomendadas las siguientes:
- Semillas de cáñamo
- Semillas de granada
- Semillas de chía
- Semillas de calabaza
- Semillas de lino
- Semillas de sésamo
- Semillas de albaricoque
- Semillas de girasol
- Semillas de uva
- Semillas de comino
¿Cómo consumir las semillas?
Las semillas no deben representar un porcentaje grande de los alimentos que ingieres diariamente, generalmente con unas cuantas cucharadas soperas basta para obtener todos sus beneficios.
Lo que sí es importante es que las consumas crudas, ya que con la aplicación de calor parte de sus propiedades nutricionales se anulan.
Son ideales para incorporar a ensaladas, salteados de verduras, muesli y lácteos.
¿Qué beneficios nutricionales ofrecen las semillas?
Cada tipo de semilla contiene propiedades específicas, no obstante, de forma genérica se puede afirmar que incluir estos alimentos habitualmente en tu dieta te ofrecerá una gran cantidad de beneficios.
Gran cantidad de vitaminas y minerales
Las vitaminas y minerales son micronutrientes de gran importancia en nuestro organismo ya que participan en numerosas reacciones químicas, por ejemplo, el magnesio participa en aproximadamente 300. El consumo de semillas reduce el riesgo de padecer un déficit de vitaminas o minerales, algo común en la actualidad por los modelos de agricultura empleados, que reducen el valor nutricional de las verduras, frutas y hortalizas.
Son muy buenas para el corazón
Las semillas contienen grasas insaturadas, que son aquellas que se conocen como grasas saludables y que resultan imprescindibles para proteger el sistema cardiovascular y mantener el colesterol bajo control.
Aportan gran cantidad de proteínas
Algunas semillas, como por ejemplo las de cáñamo, contienen todos los aminoácidos (esenciales y no esenciales) constituyendo una excelente fuente de proteínas vegetales, especialmente interesante para aquellas personas que siguen una alimentación vegetariana.
Son muy ricas en fibra
La fibra no es considerada un nutriente pues no se absorbe, pero se trata de una sustancia alimentaria imprescindible para mantener el tránsito intestinal regulado y el sistema digestivo depurado. Además, la fibra también ejerce un importante efecto cardioprotector.
Ejercen una importante acción antioxidante
Prácticamente todas las semillas contienen sustancias antioxidantes, como la vitamina A, C o E o el mineral selenio. La acción de los antioxidantes ayuda al organismo a mantenerse sano y reduce el riesgo de enfermedades degenerativas.