¿De qué se fabrica el chocolate? Lo más importante crece en los arboles del cacao, también llamados cacaoteros. De sus frutos se obtiene el polvo y la manteca de cacao. Estos dos ingredientes básicos solos no pueden crear el chocolate sin azúcar, no sería comestible.
Cuando vayáis a la tienda a compraros una tableta de chocolate, coged mejor un trozo pequeño de un chocolate de más calidad antes que una imitación barata. En los seudochocolates se sustituye la manteca de cacao por grasa vegetal. Por suerte, los dulces que no tienen nada que ver con el chocolate de verdad no se pueden vender bajo el nombre “chocolate”. Por tanto es fácil distinguirlos, en su envoltorio pondrá algo como golosina, dulce, confite etc.
Tipos de chocolate
Amargo
¿Cómo se reconoce un chocolate amargo de calidad? Por el característico sonido crujiente al partirlo y porque no se pega. O por los datos del envoltorio. Tiene que llevar un alto contenido de cacao, el 70 % se considera como óptimo. La cantidad mínima permitida es de 35 %, pero en general como un buen chocolate amargo son considerados los productos que contienen más del 50 % de cacao.
De leche
El tipo de chocolate que dio fama a Suiza. La leche compensa la amargura de las semillas de cacao.
Blanco
Nada de semillas de cacao… ¿Tiene entonces el chocolate blanco el derecho de llamarse chocolate? Sí, gracias a la manteca de cacao.
Con otros ingredientes
A esta categoría pertenecen todos aquellos que llevan avellanas, nueces, fruta confitada, uvas pasas, almendras etc.
Con sabor
El polvo de cacao se mezcla con algún sabor, por ejemplo extracto de vainilla, yogur, frutas pero también chile o sal marina.
Poroso
Chocolate con “burbujas”.
Exclusivo
Existen empresas que fabrican chocolates, por los que los goumets son capaces de pagar más de cinco euros por 100 gramos, pero también hay chocolates cuyos precios se elevan hasta los 20 euros por 100 gramos. A parte de una alta calidad de materias primas y procesos de fabricación, las marcas como Rococo, Beschle o Amedei coleccionan premios internacionales. Se diferencian con la exclusividad, ideas nuevas y apostan por la calidad, por eso se pueden permitir ser tan caros.
Sabor a placer
El consumo de chocolate ayuda a producir sustancias en el cerebro, por ejemplo la dopamina, que incitan un proceso parecido al que se consigue al tener un orgasmo. Por eso se afirma sobre el chocolate que es dulce como el amor y a veces mejor que el sexo. Entre estas sustancias pertenece también la serotonina, la conocida hormona de la felicidad. Este dato explica el por qué buscamos un trozo de chocolate cuando tenemos un disgusto. La producción de estas hormonas se activa también al hacer ejercicio.
De todo esto se desprende que el que quiera sentirse bien pero no quiere engordar, debería preferir visitar un gimnasio antes que una tableta de chocolate. Pero esto tampoco es tan evidente. Un estudio científico ha demostrado que un trocito de un buen chocolate amargo antes de la comida contribuye a una mejor digestión y a la reducción de ganas de tomar dulce más adelante.
Hitos en la historia del chocolate
Los Mayos y los Aztecas descubrieron las propiedades de las semillas de cacao alrededor del año 1000 antes de Cristo.
Desde el siglo 7 hasta el sigo 16 se usaban estas semillas como medio de pago.
El primer chocolate llegó a Europa en el siglo 17 con el conquistador Hernán Cortés.
En 1847 se creó la primera tableta de chocolate.
En la elaboración de chocolate de leche se usa leche en polvo. La inventó Henri Nestlé en 1867. Ocho años más tarde su compañero Daniel Peter fabricó el primer chocolate de leche.
Hasta el siglo 19 se tomaba el chocolate sólo en forma líquida. Sería una pena renunciar a esta costumbre. Qué rico está el chocolate caliente, ya sea solo o con una gota de ron…